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Víctor Márquez y Natalia Lozano

Con la certeza de que las juventudes son un gran motor de cambio a través del séptimo arte, concluyó la 23 edición del Festival Nacional de Cortometraje Universitario La Salle (Cortocinema), que se llevó a cabo del 25 al 27 de marzo de 2025.

 

Durante tres días, el Campus Campestre de la Universidad La Salle Bajío se convirtió en el epicentro del cine universitario del país, pues logró reunir a más de 500 personas de forma presencial y 1 mil a través de las transmisiones en vivo, quienes participaron en las conferencias, talleres y muestras en competencia que se ofrecieron dentro del programa de actividades.

 

El concurso de cortometraje recibió 48 filmes provenientes de 15 instituciones educativas del país, tales como la Universidad del Valle de Atemajac, la Universidad Iberoamericana de León, la Universidad Autónoma de Tamaulipas, Universidades de La Red La Salle, Umeri, Universidad Autónoma de Guadalajara, entre otras de los estados de Jalisco, San Luis Potosí, Sinaloa, Durango, Guerrero, Tamaulipas, Morelos, Estado de México, Zacatecas, Michoacán, Aguascalientes, Coahuila, Puebla y, por supuesto, Guanajuato.

 

Cortocinema tiene como base el modelo educativo de la Universidad La Salle Bajío en función a la formación integral de las y los estudiantes y recurre al cine como un poderoso elemento formativo y socializador de valores y creatividad humana; en ese sentido, en esta edición se tuvieron dos conferencias magistrales. La primera de ellas, dictada por Nataly Valle, fundadora y directora del Festival de cine de la Otredad (FICOT), quien compartió su experiencia de cómo un proyecto universitario se convirtió en un festival internacional.

“Tengo más de un año planeando esta charla, porque necesitaba decirles a ustedes jóvenes que no hay mejor momento que la universidad para sacar sus proyectos. Si tienen miedo, háganlo con miedo, pero háganlo; somos lo que hacemos, pero también lo que no hacemos y de eso va esta charla”, compartió la también gestora cultural que hace unos años asistiera al festival, pero como estudiante.

 

Otra de las actividades didácticas fue el taller “Dirección de Fotografía para Cortometrajes con Bajo Presupuesto”, impartido por el cineasta Irving Rentería, quien señaló que “no hace falta tener un equipo costoso para realizar proyectos cinematográficos”; por lo que explicó cuestiones tecnológicas y técnicas para lograr una buena fotografía para un proyecto fílmico. Imágenes: Revista Q / Especiales

 

De igual manera, se realizó una muestra de cortometrajes ganadores del concurso Identidad y Pertenencia del Guanajuato International Film Festival (GIFF), en la que algunos de los creadores hablaron sobre cómo los desarrollaron.

 

La conferencia de clausura estuvo a cargo de Camila Acosta, productora, actriz, guionista y directora, quien habló sobre “Cine (muy) independiente”, y que, puntualizó, se conoce como Cine Guerrilla. Asimismo, dio algunos tips para producir cortometrajes con muy poco presupuesto.

“Escribe inteligente sobre cosas que se tengan a la mano. Apuesta porque el cine sea más horizontal, en donde se aprecie el trabajo de todas y todos los involucrados”, sugirió la artista que ha participado en festivales como La Semaine de la Critique del Festival de Cannes, el Festival Internacional de Cine de Morelia, Shorts México, FicMonterrey y 24 Risas por segundo, entre otros.

 

Luego de un profundo análisis y una complicada deliberación, el jurado calificador integrado por Herbey Eguiarte, Omar Alcalá y Francisco Vázquez otorgaron los reconocimientos a los mejores cortos de cada categoría.

 

El reconocimiento al mejor cortometraje de la categoría de Animación fue para “AGARIC”, de Fernanda Alcaraz de Alba y Yaeko Murakami Acevedo, de la Universidad del Valle de Atemajac (UNIVA) Guadalajara. En la categoría Documental, “El Arte de Morir”, de Jonathan César Saúl Palomares Hernández, de la Universidad Meridiano (Umeri), recibió el primer lugar.

 

En la categoría Experimental, el primer puesto fue para “El hombre del baño” de Vianney Cabeza de Vaca Sámano, de la Universidad Iberoamericana de León. Mientras que en la de ficción, fue para “C_in_T”, de Bernardo Cabeza de Vaca Sámano, también de la Universidad Iberoamericana León.

 

En la edición 2025 de CORTOCINEMA, se incluyó por primera vez la categoría Videoclip, que dio el reconocimiento a “Reny”, de Karol Annete Aguirre Aguado, de la Universidad La Salle Bajío.

 

El gran premio se lo llevó “El Arte de Morir”, de Jonathan César Saúl Palomares Hernández, de la Umeri; pese a retratar una temática difícil y triste, como la muerte de un ser querido, su calidad técnica, estética y narrativa tocó las fibras sensibles del auditorio.

 

En entrevista, la productora de este metraje, Mariela Olmos, compartió que este corto se irá al Festival de Cannes, por lo que se dijeron muy contentos.

“Por el tema que tiene, poder hacer la grabación de los cuerpos no fue fácil; pero se logró gracias a muchos correos que enviamos, tocar puertas y mucha persistencia”, apuntó.

 

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