Cada vez que enciendes, cargas o utilizas tu ordenador portátil o incluso al comprar uno nuevo, dejas una “huella de carbono”: la emisión de gases que ayudan a calentar la atmósfera del planeta derivada de la fabricación, el uso y otros aspectos relativos a ese equipo. Los especialistas explican como reducirla.
La huella de carbono, una medición que refleja la cantidad de gases de efecto invernadero (GEI), que es emitida directa o indirectamente a la atmósfera como consecuencia de una determinada actividad, ya sea económica o desarrollada por el ser humano en su vida diaria, es uno de los principales indicadores utilizados para medir el impacto ambiental.
Esta medida, que determina la cantidad de dióxido de carbono o CO2 emitida, incluye además de este gas a otros GEI capaces de calentar el aire mediante el llamado ‘efecto invernadero’, como el metano o el óxido nitroso, calculando la equivalencia del poder de calentamiento de dichos gases con el del CO2.
Cuando cargamos el teléfono móvil, viajamos en coche o utilizamos una máquina lavadora doméstica, entre muchas otras actividades cotidianas, dejamos una estela de gases o huella de carbono, que según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), se acumula en la atmósfera y sobrecalienta el planeta, aumentando las emisiones que aceleran el cambio climático.
Cada vez que encendemos y utilizamos nuestro ordenador portátil, o incluso cuando adquirimos uno nuevo sin haber extendido al máximo posible la vida útil del anterior, también aportamos nuestra cuota de emisiones de CO2 y otros GEI a la atmósfera, de acuerdo a los especialistas.
Reducir las emisiones y ahorrar energía requiere que adoptemos en nuestra vida diaria algunas acciones, que pueden ser pequeñas pero tienen un considerable impacto ambiental en conjunto con las de otras personas, según Chris Ettery, director internacional de sostenibilidad corporativa de la compañía Dell Technologies (www.dell.com), con sede en Round Rock (Texas, EE.UU.).
“Cada uno de nosotros podemos adoptar decisiones para reducir nuestra huella de carbono, incluida la adquisición de un ordenador portátil”, señala Ettery, que propone 10 consejos para aumentar la vida de nuestro portátil y reducir así su ‘huella de carbono’ e impacto ambiental.
1 CONOCE TU HUELLA DE CARBONO.
Existen calculadoras en línea que pueden ayudarte a calcular ese dato, como Carbonfootprint.com. Además, muchas marcas de equipos pueden ayudarte a comparar la huella de carbono de varios modelos de portátiles para así informar mejor tus decisiones de compra orientadas a la sostenibilidad, según Ettery.
2 RECICLA TU ANTIGUO EQUIPO.
Si vas a comprar un nuevo portátil, considera cómo puedes devolver, restaurar o reciclar de manera responsable tu antiguo equipo. Dependiendo de la marca, quizá puedas devolverlo para reciclarlo. Algunos fabricantes pueden recoger tus dispositivos electrónicos de cualquier marca, en cualquier condición, y reciclarlos de forma gratuita, según el experto de Dell.
3 REPARA TU PORTÁTIL ANTES DE REEMPLAZARLO.
Poder reparar un ordenador portátil es esencial para mantenerlo en uso durante más tiempo y fuera de los vertederos, por lo que vale la pena comprobar si está diseñado teniendo en cuenta su reparación y el reciclaje, según Ettery.
Algunos fabricantes ofrecen a los clientes información y soporte online, incluyendo manuales y descargas para mantener el rendimiento de sus productos, listas de piezas de repuesto que se pueden pedir para hacer reparaciones, e instrucciones ‘paso a paso’ para reparar los equipos, apunta.
4 CONVIERTE LO VIEJO EN ALGO NUEVO.
En vez de adquirir un nuevo portátil, puedes reacondicionar el antiguo. Pasar por un programa oficial de renovación elimina la incertidumbre de comprar a través de sitios web peer-to-peer (plataformas en la que se puede comprar sin intermediarios), y para mayor tranquilidad, puedes solicitar que se incluya una garantía para proteger tu dispositivo, asegura este experto .
5 DISPOSITIVOS FABRICADOS DE MODO SOSTENIBLE.
Si compras un equipo nuevo, ten en cuenta si está fabricado con materiales reciclables y renovables, que se pueden reutilizar para producir un nuevo ordenador portátil sostenible, como bioplástico a base de árboles reciclado de la fabricación de papel, fibra de carbono recuperada, plástico reciclado post-consumo y caucho biológico hechos con aceite de ricino, recomienda Ettery.
También es importante conocer la calificación de eficiencia energética de un portátil, la cual permite identificar a aquellos equipos electrónicos que tienen un mejor rendimiento consumiendo menos electricidad.
6 EVITA EL CONSUMO EN STAND-BY.
En el modo stand-by, los aparatos no están funcionando, pero siguen conectados a la red consumiendo electricidad. La energía consumida por los dispositivos electrónicos domésticos en modo de reposo o espera puede llegar a representar cerca del 10% del consumo total de electricidad de una vivienda media en países como España, según datos que maneja Dell.
Para evitarlo hay que desenchufar el portátil tan pronto como se haya cargado, según el especialista de esta compañía.
7 PROCURA NO SOBRECARGAR TU ORDENADOR.
Según Chris Ettery desenchufar un ordenador portátil inmediatamente después de que se haya cargado, no solo ahorra energía, sino que además ayuda a que su batería dure más.
“También puedes ajustar la configuración de energía de tu equipo para reducir el impacto energético y ahorrar batería optimizando funciones como el teclado retroiluminado o el brillo de la pantalla, así como ajustando la configuración para obtener la mejor duración de la batería”, señala.
8 EL EMBALAJE TAMBIÉN ES IMPORTANTE.
Es importante comprobar si un fabricante utiliza espuma de poliestireno u otros materiales de embalaje que son difíciles o imposibles de reciclar. Muchas empresas ahora usan plásticos reciclados y productos naturales como el bambú para producir embalajes más sostenibles para el medioambiente, según Ettery,
9 ALARGA LA VIDA ÚTIL DE TU PORTÁTIL.
Otra medida que puede adoptar un consumidor para contribuir a preservar el medio ambiente consiste en cuidar y mantener su ordenador adecuadamente para alargar su vida útil. Para lograrlo es recomendable mantener actualizado el software para optimizar la eficiencia del equipo y protegerlo de virus informáticos, cuidar la batería y mantener el ordenador limpio, añade este experto.
10 PREGÚNTATE SI SE PUEDE ACTUALIZAR.
“Muchos piensan en cambiar de ordenador para poder ver las últimas aplicaciones o juegos. Antes de comprar un equipo nuevo, comprueba si permite actualizar componentes como la memoria, el almacenamiento, las tarjetas gráficas o la CPU (unidad central de procesamiento o procesador)”, explica Chris Ettery.
Al ser actualizable, se podrá alargar la vida útil del ordenador portátil, evitando la necesidad que comprar un nuevo equipo más moderno poco tiempo después, según concluye.
Daniel Galilea.
EFE – Reportajes